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Diario de Navarra
2000-01-12
EMPRESA
Nestlé acuerda la venta de la sociedad Alimentos Congelados al grupo sueco EQT. La planta de congelados en Marcilla podría recuperar su papel de central comercial.
Las plantas que Alimentos Congelados SA (ACSA) posee en Marcilla y Peralta, que suman una plantilla de unos 400 empleados, cambiarán de manos. La multinacional sui za Nestlé, actual propietaria, ha cerrado las negociaciones iniciadas en marzo de 1999 con el grupo sueco norteamericano EQT Escandinavia. Nestlé ha acordado con el grupo nórdico la venta de toda su división europea de congelados de hortalizas y pescados, por un precio que, según varias fuentes, supera los 200.000 millones de pesetas. En la operación Nestlé traspasará a EQT un paquete con catorce fábricas y 3.500 trabajadores.
La venta de la división europea afecta a todos los productos que Nestlé comercializa con la marca Findus, tanto pescado como verduras. Supone un negocio con ventas anuales superiores a 900 millones de francos suizos (unos 93.000 millones de pesetas) e incluye empresas en España, Italia e Inglaterra.
El acuerdo de venta, cuya rúbrica se prevé para finales de este mes de enero, afecta en España a la sociedad Alimentos Congelados SA, que está integrada por cuatro fábricas, las dos navarras más una en Olmedo (Valladolid) y otra en Villafranca del Guadiana (Badajoz). Entre todas suman una plantilla cercana a las 500 personas.
Nestlé, que adquirió Alimentos Congelados en 1995 a través de su filial Conelsa, enmarca esta operación de venta en su política de centrar sus plantas en productos de valor añadido, principalmente los precocinados y platos preparados.
Alimentos Congelados es la segunda empresa del mercado español de congelados por volumen de producción, más de 65.000 toneladas de vegetales en 1998, después de la también navarra Ultracongelados Virto, según datos de la revista Alimarket.
La sociedad ACSA facturó 20.441 millones de pesetas en 1998, 1.089 millones más que el año anterior. Además, obtuvo un cash flow (beneficios menos amortizaciones) de 294 millones y unos resultados negativos de 269 millones, según la citada publicación.
Bautismo en alimentación
La operación supone para EQT Escandinavia, fundada en 1994, su bautismo en el mundo de la alimentación. EQT Escandinavia es una sociedad integrada en el grupo EQT Partners, en el que participan el fondo de inversiones norteamericano AEA y el sueco INVESTOR (familia Wallemberg).
El grupo participa en varias empresas nórdicas, como la de fabricante de vehículos industriales SCANIA, la aerolínea SAS y la empresa de telecomunicaciones Ericson.
Precisamente, la intención del grupo nórdico de estrenarse en el mundo de la alimentación hace que los sindicatos UGT y CC OO no teman una reducción de las plantillas, aunque anuncian que estarán vigilantes al desarrollo de la operación. De hecho, desde ambas organizaciones coinciden en señalar que, cuando en marzo la dirección les comunicó el inicio de las negociaciones, se anunció que con la venta vendrían nuevas inversiones y el lanzamiento de nuevos productos congelados.
En Marcilla trabajan habitualmente unas 300 personas, de las que alrededor de la mitad son fijas, y en Peralta, Alimentos Congelados cuenta con unos 80 trabajadores, según los sindicatos. En campaña, pueden llegar a 400 y 100 personas, respectivamente.
El comité de empresa de la planta de Marcilla está formado por ocho delegados de UGT, tres de ELA y dos de CC OO y el de Peralta está compuesto por cinco delegados de UGT.
Mayor autonomía
La operación, según fuentes sindicales, permitirá que la planta de Marcilla recupere su papel de sede central comercial de la sociedad, algo que facilitará a la sociedad alimentaria una mayor autonomía a la hora de tomar decisiones.
Cuando en 1995 Nestlé adquirió Alimentos Congelados, la central se trasladó de Marcilla a la sede de Nestlé España SA, instalada en Barcelona, una función que hasta entonces se realizaba en la fábrica de la localidad ribera.
El cuarto propietario
EQT será el cuarto propietario de Alimentos Congelados, que se fundó en Marcilla por un grupo de inversores navarros y guipuzcoanos en 1957. Un año más tarde, la nueva industria de producción de alimentos congelados, aunténtica novedad en aquella época, comenzó su actividad y al año siguiente pasó a ser controlada mayoritariamente por el grupo industrial Banco Bilbao y, posteriormente, por el BBV.
Tras dos o tres años de dificultades iniciales en las que la producción se dedicó al envasado de vegetales, la planta recuperó su actividad originaria para congelar hasta 45 clases de verduras. Finalmente, en 1995 la empresa pasó a ser propiedad del Grupo Nestlé España. La multinacional suiza ha comercializado durante estos últimos cinco años productos congelados con las marcas Findus, Castillo de Marcilla, Buitoni y Compass y, según datos de Alimarket, es la segunda marca en cuota de mercado, con un 8,1%, detrás de Frudesa.
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